La bicicleta es uno de los medios de transporte que reporta numerosos beneficios, y que son recomendados por los especialistas de la salud. Por ejemplo, pedalear bicicleta no causa daño al medio ambiente, permite recorrer cualquier distancia, incluso por lugares muy estrechos. Además, al usarla se ejercita el cuerpo, algo esencial para la salud de toda persona.
Por supuesto, para que el viaje resulte agradable y no en una fuente de preocupación, es vital que la bici esté en buen estado. Para asegurarse de que es así, solo hay que escuchar lo que la bicicleta dice cuando se pedalea. Esos sonidos pueden ayudar a determinar su condición actual.
Ruido al pedalear bicicleta
Por tratarse de un medio de transporte que cuenta con dos ruedas, así como un mecanismo basado en la rotación de los pedales, es normal que haya algún tipo de sonidos a lo largo del viaje. Pero estos no deben ser muy molestos o incómodos.
Si hay ruidos al momento de pedalear, puede ser un indicativo de que hay algún problema con la bicicleta. Claro está, hace falta más información para determinar la causa de dicho ruido. En ocasiones solo se trata de algo leve que puede repararse en pocos minutos, pero en otras, la falla puede ser tan grande que requiera trabajo profesional.
Es lógico que la mayor cantidad de contaminación acústica generada por la bici se perciba mientras se pedalea. En primer lugar, porque es justo en ese momento cuando este medio de transporte se pone en movimiento, activando todos sus mecanismos. y segundo, la cercanía de quien la usa le permite detectar cualquier sonido que esta emita.
Ahora bien, siempre hay que tener en cuenta el hecho de que los ruidos pueden ser diferentes. Es más, algunos solo se presentan cuando la bicicleta ha alcanzado cierta velocidad. Pero, sea cual sea la clase de ruido, es posible detectar cada uno de ellos. Y en caso de ser necesario, hacer la corrección pertinente.
¿Cómo identificar los ruidos más comunes en tu bicicleta?
Una de las maneras más sencillas que existen para identificar los ruidos que presenta la bicicleta, es prestando atención a cómo suena. Y por supuesto tomar nota de cuál es la pieza que genera el sonido molesto. Veamos algunos de los que se pueden presentar al pedalear, así como sus posibles razones. Reconocerlos ayudará a que se pueda corregir a tiempo.
Chirridos
No es normal que se escuche un chirrido al momento de pedalear, mucho menos al frenar o dar vuelta en una esquina. Aunque estos movimientos podrían tener algo de ruido, se trata de uno muy leve. Si se reconoce que ese es el sonido molesto, entonces ya puede determinarse que la causa es falta de grasa en los componentes que lo generan.
Ahora bien, puede ser que luego de revisar, se determine que ese no es el motivo, entonces es momento de chequear los pedales. Una mala instalación en ellos generaría un sonido muy parecido al mencionado. ¿Y si tampoco es esa la causa? Habrá que hacer una revisión de los demás componentes para asegurarse de que ninguna de ellas se ha aflojado.
Raspadura
El sonido de raspado es más común de lo que parece. Su causa principal es una mala alineación de la rueda. Eso influye directamente en el recorrido de la cadena y termina por golpear la parte exterior del marco o del mismo caucho. Si se trata de este ruido, podrá reconocerse de forma sencilla cambiando de marcha, porque es allí cuando más se nota.
Golpeteo
El golpeteo puede aparecer mientras se va manejando la bicicleta y se hace algún cambio para elegir otra de las opciones en el piñón. Aunque el problema no tiene que ver con los pedales, sino con que el piñón o la cadena estén en una mala posición, aun así es un problema que genera ruido y que afecte todo el proceso que implica pedalear y manejar.
Zumbido o vibración
El causante de que la bicicleta vibre o emita un zumbido, es el eje de dirección. Pero tiene mucha relación con la acción de pedalear, porque solo se presenta este ruido cuando el ciclista se pone de pie sobre la bici para pedalear con más fuerza.
¿Cómo eliminar los ruidos de tu bicicleta?
Como hemos visto hasta ahora, los ruidos al pedalear pueden tener diferentes causas. Pero lo cierto es que cada una de ellas tiene su solución. De hecho, como vamos a ver a continuación, algunas son muy fáciles de corregir e incluso de evitar, gracias a un buen mantenimiento. Veamos la solución de cada uno.
Eliminar Chirridos
Si la causa es la falta de grasa, la solución es usar este elemento tanto en las tuercas de los pedales como en la cadena. Y, por supuesto, hay que corregir cualquier falla en la instalación o alguna pieza floja. Esto puede hacerlo el dueño de la bicicleta sin problemas.
Quitar golpeteo o ruido de roce
Es importante que desde el primer momento, toda la estructura esté bien alineada. Solo así se podrá minimizar el riesgo del tipo de ruido parecido a una raspadura. Pero, aunque a muchos parece funcionarle, no hay que confiarse sólo en la vista. Es mejor que la alineación sea comprobada por un experto.
Los mismos consejos son aplicables si la bicicleta tiene un ruido como un golpeteo. En manos de un profesional estos ruidos desaparecerán.
Deshacer Zumbido o vibración
El eje debe estar bien instalado y además, se le debe hacer una revisión constante a fin de asegurarse de que sigue estando en excelentes condiciones. Y eso también tiene mucho que ver con el mantenimiento constante que esta pieza tan importante necesita.
Mantenimiento
Si quieres conservar la bici en óptimas condiciones, es necesario que se le haga un chequeo regular. Y no estamos hablando de llevarla a un taller cada semana. Hemos señalado que el ciclista es quien mejor puede detectar cada uno de los ruidos anormales que las bicicletas presentan.
Entonces, en lugar de hacer caso omiso a las señales que se presentan en su mecanismo, lo mejor es detenerse un momento a evaluar cuál es la causa y lo que se debe hacer para solucionarla. Luego de ello, se podrán tomar otras medidas.
Se recomienda una revisión semanal de estos medios de transporte, incluso cuando no presenten ningún sonido extraño. Así se podrá determinar si está todo bien, o si requiere algo para seguir funcionando de buena forma. Entre las cosas a las que hay que dar prioridad en la revisión, están la grasa en las tuercas y la cadena.